El bulto de Sammy
Todo el que ha seguido de una manera u otra la carrera deportiva de Sammy Sosa puede darse cuenta de que la novedad que el presenta ahora con su nuevo rostro, aparentando ser blanco, cuando no lo es, es simplemente otra de sus caracterizaciones con el único afán de estar en el medio, de ser centro de atención de todo el mundo, que las personas vuelvan a hablar sobre el otrora llamado Bambino del Caribe, cuando logró levantar de nuevo el amor por el béisbol, con la ardua y feroz batalla por el liderato de jonrones contra Maguire.
Es bueno recordar que en sus inicios Sammy Sosa se caracterizaba por utilizar ropas hasta cierto punto ridículas, esto con la finalidad de lograr llamar la atención, y de verdad que lo lograba, pues solo se hablaba de la ropa con que habían visto a Sammy Sosa, tal o cual día en el Estadio Quisqueya de la ciudad de Santo Domingo, o sino de los lujosos carros en los que se desplazaba o de que lo vieron en plena Avenida Abraham Lincoln departiendo con los riquitos de ese entorno, siempre con sus estrafalarios trajes de colores muy variados.
El que ahora se aparezca con el rostro un tanto blanqueado, no es más que otra treta del antiguo jugador que dejó plasmado sus mejores números cuando ostentaba el uniforme de los Chicago Cubs, de donde también salió con muy malas relaciones, tanto con los propietarios, el manager y muchos de sus compañeros, quienes lo tildaron de poco compañero y de sólo pensar en su bien personal y no trabajar por el equipo.
Es decir que la vida de Sammy Sosa, ha transcurrido en medio de los escándalos y de sus poses, y su afán de siempre estar en la boca de todo el mundo, que las personas hablen de él, para así sentirse importante y no perder vigencia, tal y como le había estado pasando en los últimos meses, así que no se sorprendan por esta ocurrencia del Sammy Sosa, pues no es más que otro ardid publicitario para captar los flashes intermitentes de las cámaras en su rostro.
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