lunes, 23 de julio de 2007

A los artistas que se quejan de los horarios limitados

Es increíble ver en este país, a renombrados artistas quejarse por las medidas que ha impuesto el gobierno para la limitación de expendio de bebidas alcohólicas.También los escuchas quejarse a estos mismos artistas de que la piratería está llevándolos a la quiebra, y así por el estilo.

Yo encuentro dichas medidas en cierto grado justas (y no quieran crucificarme o acusarme de no sé qué cosa, que en este país le encantan las dobles morales) y es en el sentido de que por ejemplo esos artistas que podían en una noche tocar dos o tres fiestas, se han visto forzados por dichas limitaciones a ofrecer sólo una, y ahí es que está el beneficio para ese público al que ellos se deben y que tanto agradecimientos ofrecen (claro siempre y cuando no afecte sus intereses) y es que ahora usted puede ir a una fiesta y escuchar al artista tocar lo que le corresponde tocar, no llegar tarde y querer irse luego de tocar dos o tres canciones y ya.

En cuanto a la piratería, no es que esté de acuerdo con esta, pero cuantos discos venden estos artistas, cuanto se ganan por cada disco. Usted los escucha vanagloriarse de que vendieron un millón de copias, que cien mil copias y cosas así. Pero quieren que sea el público consumidor que pague el precio que ellos quieran por dichos discos, y no es que yo quiera imponerles un precio a su trabajo, sino que traten de ser un poco más conscientes, que esas personas que pagan por su música son seres humanos que trabajan y se esfuerzan por ganarse un salario que la mayoría de las veces no le alcanza para nada, pero quieren tener en su casa o en su carro música de sus artistas favoritos y al precio que las ofertan se les hace bastante difícil.

Y todo esto para qué, para ellos andar en vehículos último modelo, carros lujosos, viviendas suntuarias, exuberantes, rodeados de lambones, todo esto a costa de los siempre sacrificados y nunca tomados en cuenta, nada más que cuando pueden beneficiarse de estos. Y lo más penoso de todo esto es que siempre en la mayoría de los casos, estos artistas en lo que gastan el dinero que se ganan a expensas de su “público querido” es en drogas, vicios malditos, corrupciones al más alto nivel y luego también quieren que al final de sus carreras cuando ya toda su fortuna se ha ido por la cañería, que el Estado dominicano, con los impuestos que nos cobra dicho Estado, les otorgue una pensión o les pague su tratamiento en rehabilitación por ser drogadictos y otras cosas más.

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1 comentario :

Anónimo dijo...

No estoy de acuerdo con la ley porque no veo que provecho hemos sacado de ella disminucion de la delincuencia? Nooo esta peor.
este es un pais es un punto turistico y nuestros visitantes no gozan de las actividades nocturnas, y en cuanto a los artistas no solo ellos se benefician porque cuando realizan una fiestas se supone que hay mosos y puerteros y comerciantes de esos establecimientos donde se realizan las fiestas los cuales tienen familias y ya muchos los estableciminetos cerrados por dicha ley